4 tendencias de RRHH que aplicarás en tus eventos este 2020

Las habilidades blandas o soft skills toman protagonismo

El currículum está dejando paso a habilidades más sociales y de comunicación. Las soft skills están relacionadas con el cociente de inteligencia emocional. Se trata del conjunto de rasgos de personalidad, habilidades sociales, comunicación, lenguaje, el optimismo y la amistad que caracteriza las relaciones entre personas. Por eso, una cosa es ver un CV y lanzarle cuatro preguntas y otra cosa es poner a tu entrevistado en acción. Ahí entra en juego el  evento de captación de talento: encontrar talentos (antes de hacerle crecer) es la primera clave del éxito.

Por lo tanto, el evento se transforma en una herramienta para acercar y conectar al empresario con el talento, pero sobre todo permitir testear personalidades de forma muy real, poniendo en escena a los talentos. Poner en situación a los candidatos permite ver su personalidad real, observarles ante retos parecidos a los que tendrán en su trabajo.

Employee wellness

Las actividades relacionadas con el cuidado del cuerpo y mente, como son el deporte o la alimentación saludable, cobran más importancia. Así, las empresas están facilitando a los empleados apps para gestionar su salud y deporte, bonos para el gimnasio, charlas sobre alimentación saludable, etc. Además, con el desarrollo de la neurociencia, cada vez se sabe más sobre la importancia de la salud física para el desarrollo mental y por ello crecen tendencias como el mindfulness (¿moda o cambio profundo?). Además de mejorar la salud de sus empleados, estas medidas han demostrado tener una buena incidencia en su motivación.

El empleado en el centro: employee experience

Se han convertido en los nuevos mantras de RRHH. Tanto es así que algunos departamentos de personal están pasando a denominarse ‘departamentos de experiencia del empleado’. El departamento de RRHH ha dado un giro más estratégico y está convenciendo a la dirección para que pongan al empleado en el centro. “Si se nos llena la boca de decir que ‘las empresas son las personas que la forman’, tiene todo el sentido”, nos señala Javier Rueda Martínez (Thandem). RRHH cada vez más se preocupa por «crear empleados felices”, por su desarrollo y su motivación… y precisamente, un evento formativo o una actividad motivante en equipo puede ser una herramienta para conseguirlo.

Más digitales, más tecnológicos

El ser humano, ante la irrupción de la tecnología, vuelve a buscar en su interior lo que lo diferencia de las máquinas, y trata de potenciar estas características. La tecnología nos abre infinitas posibilidades de gestión de los asistentes (agilizar inscripción, personalizar actividades y logística, conocer a los participantes, etc.) pero también recursos y dinámicas que integran a todos por su facilidad de implantación y uso. Los smartphones pasan a tener un papel protagonista.

En todo caso, la tecnología no suple la vivencia. Con tecnología o sin ella, el éxito del evento es conseguir una experiencia WOW entre personas que se reúnen a compartir, sentir y celebrar algo. Así que relevancia especial tiene el evento que combina la experiencia con tecnologías que permiten la medición.