Booksy Secret Party, la belleza de ser valiente

Un acceso diferente para marcar el tono

La experiencia empezaba antes de entrar. Cada invitado recibía una palabra secreta que debía decir al llegar al museo para poder acceder. Solo entonces se abría el paso a un pequeño jardín oculto, un espacio que conectaba con el interior y servía de introducción a la historia de la noche.

Dentro, el ambiente era completamente distinto al habitual del museo: luces teal, velas repartidas por el espacio, estructuras metálicas y arte urbano. La mezcla de tecnología y estética artesanal transmitía el equilibrio que define a la marca: digital, pero con alma.

Acciones que contaban una historia

La velada se construyó en torno a una narrativa clara, Be Brave, que se expresó a través de distintas acciones pensadas para romper la rutina y despertar emociones.
Una performance aérea sobre maquinaria industrial unió fuerza y belleza en un mismo plano, mostrando la valentía como actitud. Poco después, una camarera sorprendía al público convirtiéndose en cantante e interpretando temas como At Last y Valerie, en un flashmob espontáneo que cambió por completo la energía del espacio.

En una esquina, una mesa de tarot con péndulos y bolas de cristal invitaba a los asistentes más curiosos a participar en lecturas personalizadas, explorando su lado más esotérico. Cada propuesta aportaba una nueva forma de conectar con la marca y con los demás.

Un mensaje que invita a actuar

Las proyecciones de marca reforzaban el mensaje principal con frases como “El futuro es de quien agenda. No de quien espera.” Ese mensaje de movimiento y decisión dio paso a un show de batería y voz en directo, que marcó un punto de inflexión en la noche y preparó el ambiente para el cierre festivo. El DJ set final y la barra libre mantuvieron la energía hasta el último minuto.

Conexión y autenticidad

Desde Booksy explicaron que el objetivo no era solo generar notoriedad, sino crear una experiencia compartida que representara su manera de entender la belleza: valiente, humana y sin filtros.

Un cierre con significado

Antes de salir, cada invitado recibió una impresión lenticular en la que el logotipo de Booksy se fusionaba con su activo más importante: las personas. Un detalle sencillo, pero simbólico, que resumía la esencia de la marca y el mensaje de la noche.

La Booksy Secret Party no fue solo una acción de comunicación, sino una demostración de cómo una marca puede hablar a través de la experiencia, la creatividad y la emoción compartida. Una historia que recordó que la belleza también está en atreverse.