La estrategia del evento Skin Academy, el stand-alone de Almirall

Ante todo, la events strategy de Almirall define sus códigos de comunicación y la experiencia que quiere ofrecer en sus eventos. “Cercanía” es la palabra más importante dentro de esta estrategia, junto con el concepto de Barcelona por su carácter agradable, cercano y cosmopolita. Esto es, en resumen, lo que los asistentes a cualquier evento de Almirall tienen que experimentar.

Cercanía, tecnología, ciencia: la experiencia. La experiencia empieza desde fuera del recinto: el equipo de Almirall espera a los médicos fuera del recinto, les avisa de lo que tienen que preparar para entrar, lo cual permite una primera experiencia muy personal (cercanía) y facilita la logística en uno de los momentos de la verdad de un evento, el check-in.

Al entrar, un mostrador con una impactante pantalla de LEDs da la bienvenida, asegurando una experiencia tecnológica siempre útil para recordar la dimensión científica del laboratorio. Detrás de este mostrador está la zona de exposición, que destaca por un ambiente algo oscuro, que sorprende… pero tiene la enorme ventaja de hacer que los puestos de exposición, que combinan carpintería y pantallas, destaquen mucho.

Tecnología para una comunicación experiencial e impactante. Los coffees se hacen en esta zona, permitiendo a los médicos saber más sobre las soluciones de la empresa. La zona explota varios tipos de tecnologías interactivas, como un stand en el cual el participante puede tocar trocitos de simili piel (de silicona) con varias lesiones relacionadas con la psoriasis o el cáncer de la piel y ver toda la información científica sobre la patología. Dentro de los múltiples stands disponibles para el aprendizaje del participante, se incluye una zona de posters electrónicos con los últimos avances en dermatología. Y al final de la zona de exposición, un espacio con sillones permite a los dermatólogos dialogar con el personal médico de Almirall, un poco al estilo “Genius Bar”.

Pero si la zona expositiva es importante, el protagonismo del evento es ante todo para la formación. Una gran zona de formación tiene sesiones casi continuas, en las cuales intervienen, según nos comenta el laboratorio, 13 de los mayores expertos mundiales en dermatología. Una manera de aportar un valor añadido enorme a los médicos.

El evento cuenta con su app propia, que acompaña la experiencia de los médicos. Y como cambio reciente, en un evento donde la formación casi “se comía” todo el tiempo: se ha subido la duración de los coffees, de 15 a 30 minutos. Una clave para que la comunicación entre médicos, que sabemos que es una de las claves de estos eventos, se pueda hacer bien.

Más allá de la formación… Las cenas se hacen por nacionalidades, haciendo una puesta en escena menos impactante que si fuera una gran cena plenaria… pero permitiendo una calidad de comunicación entre el equipo de Almirall de cada país y “sus” médicos mucho mayor.

Se confirma el atractivo de este tipo de evento, tanto a nivel financiero (los costes de congresos han tendido a tanta inflación que hacer su propio evento ya no tiene que ser más caro que participar en un gran congreso internacional)… y permite transmitir su conocimiento, aportar valor a los médicos, crear relaciones y conocer mejor sus necesidades, y sobre todo transmitir “thought leadership”. El mismo nombre de este evento, de hecho, transmite una imagen de formación puntera especializada, y no de evento promocional de Almirall.