Hyundai presenta su nuevo Kona en la finca Astilbe

Con todas las medidas de seguridad, lo cual nos recuerda que pocos sitios de nuestras vidas son tan seguros como un evento organizado profesionalmente. “Utilizamos espacios muy grandes de la Finca Astilbe (Madrid), las mesas de ocho se utilizaron para cuatro personas, los coches se utilizaron de forma individual y se higienizaron. Dimos mascarillas de las más seguras a todo el mundo, exigiendo que se pusieran esta mascarilla nueva. E hicimos para todos una prueba de antígenos antes de entrar.  De hecho, una persona de la organización lo tenía y no lo sabía, muestra del interés de estos tests”, comenta Juanjo Martínez, director de comunicación de la marca.

Ha sido una experiencia convincente: “En nuestros eventos, seguiremos haciendo tests. El coste no es muy elevado (unos 40 euros) y te da mucha más seguridad”, añade Juanjo. ¿Y el porcentaje de periodistas que no vienen? El no-show ha sido del 10%, un nivel bajo. “Y todos agradecen mucho que se lo hagamos presencial”.

“En nuestras presentaciones el hecho de verse, además de poder probar el coche, es fundamental y queríamos mantenerlo. La comida también siempre es fundamental en nuestros eventos -tenemos esta fama en el sector- y la gente se acuerda mucho de esto”.

El evento en sí fue sencillo y Juanjo nos comenta que, si bien es importante asegurar una excelente calidad de la experiencia como siempre, el factor wow! ya no es ni tan fácil ni tan necesario como en tiempos normales. El hecho de salir, verse, ir a un evento y tener contacto con otros periodistas y con sus anfitriones es ya algo que los invitados valoran mucho. Ya volverán los pedazo de montajes y experiencias memorables, de momento nos volvemos a ver. El evento, las pruebas individuales de coches, una rueda de prensa, y la comida.

En cuanto a la vuelta a los eventos, Juanjo ya ha empezado a caminar: “Cada mes hacemos eventos”… y se preocupa de que grandes eventos de los próximos meses pasen al segundo semestre, generando una saturación de eventos en el segundo. “Saturación de eventos”, ¡qué bien suena!