Incentivo en Costa del Sol 100% golf

Los grupos, de unas 50 personas, viajan un finde semana a Sotogrande para jugar durante dos días. Y no precisamente en un campo corriente, sino en el mítico Valderrama, donde se jugó la Ryder Cup que salió de Inglaterra para jugarse en España.

Según Javier Garrido, «un campo donde es muy difícil jugar».

Un día antes de la salida, un servicio de mensajería pasa por las casas de los asistentes a recoger sus palos de golf y su maleta.

Cuando, al día siguiente, llegan al hotel, -se ha hecho entre otros en el NH Almenara, el Río Real Golf Hotel, La Quinta Golf & Spa Resort y el Villapadierna Palace- se encuentran sus palos ya en los buggies personalizados.

Otro lujo es que los clientes viajan con diez profesionales del golf que no solo jugan con ellos, sino que conviven con ellos full time: cenan con el grupo, salen con ellos y duermen en el hotel.

¿Objetivo? Que los invitados puedan estar hablando de golf 24 horas al día.

El sábado y domingo, hacen torneos con un profesional en cada partido. Para los debutantes, se habilita una zona exclusiva con un profesor, y a quien no le apetece jugar al golf, unos conductores les llevan de compras o a la playa. Para las cenas se reúne a todo el grupo, que recibe los premios de los torneos.

La vuelta es igual de cómoda, con maletas y palos que viajan aparte y se les entregan, el lunes, en su domicilio.