Mister Poppins lanza una nueva (patentada) solución inmersiva: the Beast

Nos lo explican: los vídeos inmersivos se graban con una “meta-cámara” compuesta de seis cámaras, con lo cual la proyección ideal para una experiencia inmersiva (sin ir a gafas estilo Oculus) es una proyección a seis paredes. La solución por tanto se basa en una estructura con seis paneles con sus pantallas de tela, y un proyector para cada panel, en principio en modo de retroproyección. Se crea así una experiencia inmersiva que recrea realmente un espacio a 360 grados.

El tamaño es adaptable pero la estructura tal y como está concebida tiene paneles de 30*8m y el espacio completo puede acoger eventos de 300 a 700 personas. Si no se puede hacer retroproyección, los proyectores se pueden colgar dentro de la estructura pero entonces reduciendo aforo para evitar que la gente cree sombras. El sonido es dinámico, repartido por el espacio, es decir que si el vídeo representa un avión que pasa, el sonido se mueve también. La iluminación es Led para ser dinámica, elegante y mantenerse fría.

La inmersión está llena de símbolos, como nos comentan desde Mr Poppins: “Esta innovación nos ayudará a ver a la empresa desde todos sus ángulos, y nos permitirá introducirnos en su estructura para así poder exponer en 360º todo lo que la compañía abarca y aporta en el día a día del individuo. Los invitados sienten no solo la empresa, sino la actitud que tenemos para el desarrollo de la sociedad en la que vivimos y donde tenemos mucho que aportar.

Toda la cadena se hace en HD, tanto la grabación como los proyectores (en principio, de 30.000 lúmenes aunque se pueden adaptar a cada evento). Además, una ventaja importante es que el público tiene la libertad de orientar la visión hacia cualquier lugar, con lo cual se procura que las sillas sean giratorias para maximizar este impacto inmersivo.

Mister Poppins ha creado esta solución y conseguido registrar la propiedad intelectual y la propiedad de ingeniería, es decir que tanto la idea como la solución técnica están registradas. Un cambio de planteamiento comparado con lo habitual, comenta Fermín Pérez de Mr Poppins: “Solemos inventar las cosas en base a la petición de un cliente; aquí hemos pensado en la solución, la hemos pulido a nivel creativo y de ingeniería; la hemos registrado y ahora salimos al mercado”.