Un escape room para descubrir la oferta MICE de la Costa Brava

Con el humor del monologuista Víctor Parrado comenzaba un viaje lleno de enigmas que había que desvelar para descubrir las posibilidades de reuniones e incentivos del destino Costa Brava Girona. ¿Cómo lo hicieron? A través de un escape room, a cargo de la empresa de gamification Green Hat People, para el cual Fernando Le Monnier presentó las reglas del juego y la forma de crear los equipos de este formato dinamizado por las empresas asociadas al Convention Bureau. Los equipos que participaron en este escape room tenían que superar los retos planteados por las empresas MICE de Girona que les mostraban juegos y pistas tras las que se encontraban las características de la oferta de turismo de reuniones del destino. Adivinanzas, acertijos, leyendas y pruebas que llevaron a los equipos a recorrer lugares como los volcanes de la Garrotxa, la ruta del vino de la DO Empordà, el surrealismo daliniano, las leyendas de Girona o el Lloret de los indianos, entre otras propuestas. Y por el camino… mucho networking.

Toda la activación se desarrolló en los 1.700m2 del espacio Pangea The Travel Store cuya versatilidad permitió crear diferentes escenarios: en los pequeños puestos de Pangea se realizaron las pruebas de la mano de las empresas asociadas (una tendencia que vemos cada vez más es la de utilizar espacios pequeños para mini presentaciones, a modo de palcos); el olivo central se decoró para convertirse en el photocall; las salas Este y Oeste (con capacidad para 12 y 8 personas respectivamente) se transformaron en enclaves de la Costa Brava; junto al  Auditorio (80 personas en teatro) se ubicó el trono con disfraces para caracterizarse como los personajes de Juego de Tronos, una serie que ha sido un gran reclamo turístico para Girona, ya que fue el plató natural de ocho de los diez episodios de la sexta temporada; un espacio de networking en la sala Behind the screen (50 personas); y en la Plaza Club Coliseum (200 personas) se recrearon las noches de verano de la Costa Brava, con música en el escenario y una cena cóctel preparada por el restaurante Sala Gran a base de productos locales del territorio acompañados con vinos de la D.O. Empordà.